domingo, 24 de mayo de 2015

Javier Sarasola


El día en que una lágrima tuya cayó sobre mis labios pude probar la sangre de tu corazón herido,que lloraba dolorido lo que al mundo silenciaba tu voz asustada y fugitiva.

CONJUGANDO TU VERBO MUJER

Artesano en la colina de tus pechos
y explorador ciego en tu piel,
me pierdo en tus caminos perfumados.
Este temblor, este suspirar,
Este latir que me acerca al cielo de tus ojos,
en la geografía tibia de tu cuerpo
todo es poesía y solo poesía,
que arde con las estrellas que besan tu desnudez.
Quiero tocarte lento
como se comen las uvas en los racimos,
para saber que sienten los ángeles al tocar el cielo.
Si, Mujer me vuelves un manantial que emergen y pujan
en cada poro, que grita en cada poro,
que venerar tu desnudez de luna
y sueña con tus secretos,
que es leña en la forma de tus labios,
y comulga sediento en tus templos.
Es en mi poesía donde cada palabra
quisiera hacerte el amor,
ser llamarada en tus pechos,
ser caricia en tu espalda,
ser beso entre tus piernas,
ser suspiro entre tus brazos,
ser poeta en cada verbo de tu cuerpo
para conjugar noche a noche
la vida…desnuda
como a mis ojos entera te regalas,
para escribir con tinta sangre y tinta carne
la poesía de tu nombre, primavera,
la poesía con tu piel, golondrina,
la poesía para tus labios de miel y cerezas,
la poesía para quemar y libar suspiros.
Mujer, Para hacerte el amor
hay que ser poeta en cada caricia,
en cada beso que arda y queme,
en cada mirada que ate e invite,
para escribir con los dedos en tus formas
y escribir con la punta de mi lengua,
suspiros en las almendras de tus jardines.
Si es verdad que Dios te robo de mis costillas,
¡tanta bella había entre mis huesos
que te hizo, diosa ¡
Solo sé Mujer lo que siento en mi corazón
que se vuelca como una copa de vino,
o una ráfagas de viento entre las hojas
sobre el altar de tu desnudez de plenilunio.

QUIERO VERTE

Cómo te llama mi corazón en cada latido…¡¡¡
Te busco entre la gente que pasa por la calle,
En la soledad de una esquina,
Y en el silencio de una plaza preferida.
Te extraño como la noche la luna añora a medianoche.
Solamente tú eres capaz de llenar este inmenso vacío
Aquí en el abismo frío de mi pecho abierto.

Quiero verte,
mis ojos sin tu mirada pierden horizonte.
Quiero verte,
mis labios son amargos sin el dulce de tu boca.
Quiero verte,
extraño tu perfume besando mis sentidos
Y mis manos tejen en el aire telarañas pensando en tu piel.
Quiero verte
profunda entre mis brazos escondida
Porque deseo soplar en tu corazón con mi mirada
para encender los luceros de tus sueños como teas
Y anudado a tu cintura, quedarme anclado a tu vida.

Quiero verte…
asómate a la ventana de mi vida.
Sal al balcón de mi silencio con tus rosas en plenilunio.
Vente en un cometa polizonte y desembarca en mi lecho
Como esas olas cálidas que hunden sus proas
en las caracolas que deja en la arena salina del alba.
Eres tu mi revolución,
mi grito libertario,
mi bandera en llamas.

Quiero verte,
Vente caminando descalza
por las calles solitarias de mi poesía
Y espérame en esa esquina de la memoria
bajo la luz de la naciente luna en la primavera,
necesito de tu boca y tus brazos para prolongar
mil años más tu ausencia que me quema en el alma.

DESPUÉS DE UNA NOCHE DE LLUVIA

Después de una noche de lluvia 
todo es silencio, todo es calma 
apenas se escucha la música de fondo 
y el murmullo de unos vasos al chocar suavemente. 


Ha llovido 
el agua dulce de las saladas nubes se ha llevado todo 
la mugre, el olvido, la colilla del cigarro, las huellas 
los pasos indecentes, los tacones presurosos 
las sonrisas esquivas 
los escupitajos 
los náufragos 
y las semillas. 


Así quisiera que fuese siempre, 
que lloviera una noche eterna 
y después dejara un cielo sin nubes, 
un silencio ligero, sin costuras, sin espera 
sin prisas y sin espacios, 
un silencio que derramara su melodía 
sobre los frailes, los padres, 
las putas y los gatilleros 
las iglesias, los niños que lloran su soledad en la almohada 
los gatos tristes 
los libros deshojados 
las faldas rasgadas 
y los perros sin dueño. 


La lluvia se ha llevado todo 
menos el recuerdo 
la esperanza, la sonrisa 
la caricia, la palmada, la compañía 
la boca pintada de carmín 
que permanece ahí 
en esa esquina 
esperando al oficinista 
que pasa sin verla pero que le dice con su boca cerrada 
-sígueme- 
urgido de orgasmos 
urgido de oídos. 


Parece que esta noche 
El ruido se ha quedado dormido. 

Los toboganes de tu piel


Por los toboganes de las nubes la luz  se acuesta
Cuando el reino de las estrellas murmura aún su canción oculta
Por las cuestas de las nubes mí corazón despierta o llora
O grita, clama y blasfema.
Por el dulce interior de las nubes
Los laberintos de muñecas saludan
Lloran lágrimas de oro pálido y extienden sus brazos de viejas ideas.
Por el corazón de las nubes tus labios de algodón 
Te llaman. 

¿Dónde vas a encontrarlas?
Donde tienes que  mirar ¿lo sabes?
Sí, sí lo sabes y lo temes
Porque la noche   negra te anda buscando
Porque la corrupción de los cuerpos te espera
Porque la las tinieblas te han de parecer amables
Cuado la puñalada del átomo te cause infinitas heridas dispersas.

Por los toboganes
Por las calles
Por el sumidero de los pantanos  negros
De aguas y cuchillas negras
Por el andén del metro
Donde la sangre de  Manuela se escarcha todas las mañanas
Por el iris de los cielos
Por el iris de tus ojos
Tus ojos sí, pozos inagotables
Cárcel de tus universos
Éter de sones antiguos
Por
Tu piel
Mortaja viva de tu corazón en llamas
Futura ceniza de nostalgias.

DONDE TE BUSCO


Donde te busco, querido Mario,
-en la tierra, en los árboles, en la alegría-
te veo, sí, dibujando encantamientos
y vértices y júbilos conclusivos.
Estás Mario, aquí nomás, sin domingos,
en las hojas -revoloteando cómplices-
de los otoños y de las primaveras.

Donde te busco, Mario hermano,
en la humanidad esperanza
y en las esperanzas derramadas.
En la vida, Mario, ahí estás,
con la poesía guerreando a las guerras,
con el amor y el desamor,
con los besos enteros y con la palabra.

Donde te busco, en la tentación del amor
y en los sueños altos, de montañas,
y en las derrotas también
-reclamando que no nos rindamos-
donde te busco, Mario, 
junto a nosotros y bajo estas estrellas,
te encuentro

NOCHE DE ENSUEÑO

Cuando, si no mejor noche,
al haber blandos besos,
cuando la Tierra y el Cielo,
hacen soñar con horas,
de perfumes y esplendores.

Van las auras ondeando,
y haciendo que bulle,
en bosques y praderas,
donde clarean diamantina,
astral fulgor sin sombras.

Tú cerca, y mi alma alarga sus alas,
a lo ancho de este mudo suelo,
cual no necesita de nada,
para ver las noches más claras,
llaneando camino a tu hogar.

Tu ventana nos deja ver,
como esta noche, es una extensión del día,
o un adelanto de aurora,
y su silencio los sentidos agudiza,
para percibir… tus latidos.

Mirándote con este esplendor nocturno,
tus brillos son más claros,
más grandes y sonrientes,
bésame y deja que el amanecer,
atisbando su primer rayo… nos encuentre.

Capítulo

La tristeza hace
que estas palabras traigan
sensaciones que expresaban
viejos versos.

Este lugar 
esta visión 
premonición 
dejavú quizas

Un nuevo cierre 
de un triángulo
punto de partida,
ascenso , descenso.

Lágrimas , 
arena entre mis dedos
se derramó toda...
la que pude sostener.

y si todo final
es un comienzo
para que agregar páginas
a un libro que debe terminar. 

AUSENCIAS

Se viaja no para buscar el destino
Sino para huir de donde se parte
Miguel de Unamuno
Qué bueno sería irse;
Pero sin maletas,
Sin arrastrar la sombra vaga
De tantos ojos insondables,
De tantos besos agridulces;
Sin arrastrar la sombra vaga 
De la calle sin nombre, la más atroz!,
La del aullido sordo de la desventura,
La del humo denso de lo incierto;
Irse desnudo, -como el alba-
Sin nada, 
Incluso sin uno mismo!
Irse y sentarse
En la hondura de la Ausencia,
Por allá lejos,
Quién sabe dónde!
Y tomar con la mano 
Del agua del olvido;
Sanarse la amargura del alma,
Sanarse la vieja tristeza
Que bulle en el espejo
Que nos refleja mientras
Caminamos dormidos, dándole la espalda
A la Vida Ciega.
Qué bueno sería olvidar
Este grave afán de olvido
Y renovar el amor,
Renovar los votos con lo otrora consumido, 
Con todo lo que perennemente 
Tiene que estar envuelto en plumas
Suaves de ensoñación.
Volver a caer al abismo
Pero con honda sorpresa;
Volver a sentir el Pecado Mayor:
Ese primer mordisco de la voluptuosidad;
Y sufrirlo y amarlo y odiarlo,
Oh! Celebrarlo en sacra soledad;
Volver a desflorar con alma trémula
La perfumada santidad de la noche,
Palpar su vientre de madreselvas,
Besar sus labios de dulce hiel,
Embriagarse por vez primera
Y trepar por las cúpulas del cielo
Para morder esos grandes racimos
De la espiral alucinación…
Qué bueno sería
Cortarle el péndulo al corazón
Lacerado, denegrido, contristado;
Tumefacto por la agonía 
Y la fugaz alegría del amor.
Deshacerse de ese pequeño infierno
Para volver a nacer 
Tras el último gemido 
De la última resaca:
El estertor postrero 
De aquel que ya no sueña! 
Dejar que ese mundo calcinado
Se lleve en su caída desventurada
El espectro aciago de la Muerte;
A merced de poder sumergirse 
Sin rostro, sin vergüenza, sin dolor,
En la vasta mar del purpurino anhelo.
Ah! La Mar…
Qué bueno sería olvidarla
Para volver a encontrarla:
Opalina, furiosa, próvida, sabia, taciturna
Bajo el sosiego de las platas dormidas;
Bañándose en secreto en las cascadas 
De músicas y rosas negras
Que brotan de la inescrutable inmensidad.
Y abrir los ojos!
-de nuevo fúlgidos-
Y sentir el tenue ardor
De las lumbres de los girasoles,
De los fuegos ardientes de las amapolas;
Las llamas incandescentes del ruiseñor
Que unge los senos albos y tersos
De la mañana pura
Con el poderoso volcán de su canto.
Sí! Abrir los ojos,
Cual estrellas hambrientas
Que devoran la belleza de un Mundo Nuevo,
Que devoran con locas ansias, 
-Ah La Locura!-
Que devoran todas esas fragancias
Que manan del riscoso y perverso
Silencio de la mujer.
Qué bueno sería llegar,
Impoluto, inmarcesible,
Llegar, llegar,
Así sea sin haberse ido

SINFONÍA FUGAZ

El Poeta, el mamotreto de la Vida,
Tan sólo conoce ese amor monstruo que surge,
Que se alza torvo desde la inconsciencia.
El tiempo va tan len-ta-men-te
Que cuando termina el coito universal,
Simplemente quedan los surcos en los terrenos baldíos
De la supuesta emancipación.
¡Pero menos mal no estamos tan tristes!
Porque esta cuerda está más floja
Que los dientes de la vejez.
Aunque no! Mejor contemos historias…
Como cuando quizá nací
Y madre no se dio de cuenta.
Así de enojada estaba con la Vida, con la Sombra, 
Conmigo mismo; ¡pero no con Dios!
Tras hacerte el amor
Bajo la umbrosa y fragante languidez de la medianoche,
Te entierro, ¡impávida!, en una alta colina
Para que de tu espalda blanca y constelada
Nazca una huerta de amores sin desilusión.
Y yo veré mis costillas prominentes 
Como altas y níveas cordilleras.
Y te sabré muerta en la eternidad de lo bello.
Pero no tendré hambre ni recuerdo
Porque el mundo y Dios se habrán ahogado
En la suave y rumorosa corriente.
Ay, ay, ay!
Cómo ante estos martillazos tempestuosos
En mi finita y trémula puerta,
Siento nostalgia, honda nostalgia de todos aquellos
Que mañana morirán.

Esencia de mi sueños
que has navegado en el tiempo 
de mis pensamientos.
Se ha deslizado la vida 
pero te recuerdo en las charlas infinitas
donde tu mirada de lince me desvestía.
Carácter fuerte y dominante 
levantabas al alma perdida
en el laberinto de recuerdos diluidos.
Tiempo de sonrisas 
nuestras historias se entremezclaron
hablando de tu música y yo de la mía.
Te ame en la locura de los sueños 
tú, jugaste con mis sentimientos
sin embargo hemos quedado unidos
entre caricias que ya no nos permitimos
pero que nos levantan la vida.

Las viditas de Azul

La mente de Azul era asaltada por el juego de las palabras en sus ambigüedades y diferentes orientaciones, eran presencia buscada y rescatada o tal vez azarosas, aunque sería un facilismo adjudicárselo a esto último, eran un accidente, una desilusión, varias desilusiones o la aparición de un hecho fantástico que sería literaratura del mañana. Hechos que gravitan debajo del paraguas de un puente, de un lado y del otro, a veces del lado mas fascinante, que conecten a los primeros suburbios con el ahora, que entren y que salgan como en sueños despiertos, atravezando sombras de todas las gamas.
El juego de las palabras repiquetea, es percusión a veces lejana en la selva, continúa emitiéndose con sus vaivenes y registros, todo queda grabado en el disco y aunque se desee formatearlo resulta imposible, no es como en las máquinas, las huellas son indelebles, las jaulitas de las emociones emiten sus pequeños latiditos, son sensibles a cualquier desliz. Son como pequeños seres que conviven sus mínimas vidas, porque están diseñadas para una única emoción y están atentas a intervenir y requerir cuando se sientan involucradas. Están presentes estas viditas y se les ocurre salir una tarde a todas juntas a dar un paseo, paseo por el Arga, el río de un paseo sacado de una pintura de Renoir, salir a separarse prudencialmente una de la otra, a observarse detenidamente como nunca y esto obliga a conocerse como nunca, a desenmascararse. Una de ellas, muy en particular, toma la palabra y aprovecha cierto estado de confusión para dominar el centro de la escena e intenta hacer gala de sus habilidades, pintando un panorama crepuscular de desasosiego. Era el crepúsculo o se le parecía en demasía y tenía el camino allanado, también alimentado por las dinámicas. Las otras voces callaban o en el peor de los casos no eran escuchadas por el cuerpo que las transportaba, la señorita Azul. Hacía muy poco que la vidita que se expresaba y tenía el poder era la que daba luz y rienda suelta a las barreras inhibitorias, era como una inyección de la hormona oxitoxina que además de generar ese estado, negaba la visión de la realidad. Igualmente algunas alzaron su voz con más fuerza y la discusión se tornaba áspera, la noche estaba en ciernes, el cuerpo desgastado de Azul pedía anticuerpos, ayuda a esas palabras que siempre anduvieron dando vueltas en su universo, intentando redescubrirlas y reinterpretar su ambigüedad. 
Es noche avanzada ya y Azul ahora duerme, en el teatro de sus sueños suben a la tarima del escenario todas sus viditas a interpretar el juego de sus palabras sin maquillaje y deberá descifrar qué ambigüedades se esconden detrás de cada una y continuar el gran teatro.

REGALOS DE AMOR

Quién en esta vida
perdidos entre las aguas de sentimientos
ha navegado sin la claridad 
donde las corriente lo lleven.
Bebiendo en cada suspiro 
pasión que se acrecienta 
en el palpitar de los anhelos.
La frialdad de los pensamientos llega 
por aquel que el corazón se le concedió
y en un instante se dilapidó.
Sonrisa que logra salir de nuevo 
esperando en el soplo del tiempo
conceder toda la pasión del amor 
de aquel que lo sepa apreciar.

MENTIRAS MUDAS

Ella duerme un cansancio
acunado en el útero
de la memoria.
Mece entre las manos
sus ojos sonámbulos
y les canta cenizas
que amordazan las horas.
Ella es libre encerrada
por las jaulas de la noche.
El sol le calcinó el corazón.
Y miente cuando devora 
palabras evitando que nazcan.
Siempre miento.

Manatowa


POESÍA BREVE XXII

¿Cómo aprender a volar?
Lo cierto es que tomo un libro
y vuelo, y tu mano y un simple viento,
y cuando asomo sobre una docena
de pequeñas gotas de agua,
o cuando cierro mis ojos.
Entonces, creo, que solo se debe aprender
a sacar un poco los pies de la tierra.

Sonrisa de un angel que duerme.....

Como todas las tardes llegue a la casa de la abuela Isabella.El viaje habia sido complicado,transito , bocinazos,el arreglo de calles incomodaron mi arrivo. ¡Cuando me ire a vivir al campo, deseo naturaleza,arboles,silencio,paz.
Entonces la veo,Irma limpiando la vereda.El otoño trae consigo la mani del viaje misterioso de miles de hojas secas ya resquebradizas.
En el lapso que mama concurria a tribunales o a su estudio de abogacia ella se ocupaba de la casa mas los cuidados de la abuela,con su precaria salud recibia de Irma medicacion,inyecciones diarias y compañia.
Tierna compañia.
-Dejaste luminosa la calle,barriste todas las hojitas habidas y por haber!!

-Siii, te estabamos esperando Francesca,........queres mate o un cafe con leche primero?

A veces encontraba a mi abuela dormitando en el sillon mullido de raso,otras sentadas al lado del hogar de invierno pensando vaya a saber que historias intensamente vividas.Siempre el tiempo pasa inexorablemente y al final es tan corto.El tiempo" que todo lo pacifica tambien vuela como esas mismas hojuelas !
A sus pies siempre un rosario y otro que libro de la vieja biblioteca ,cuando la abuela estaba con animo las tres nos dirigiamos hacia el jardin de adelante donde el sol de a poco se iba corriendo.Alli o en la mesa de cedro lustrada del comedor Irma colocaba un mantel para cada ocasion,el infaltable mate o el te con cascaritas de limon,ademas de rodajas de budin o galletitas dulces y nuestra charla.

Casa de Isabella,
Se dividia en dos partes en un mismo terreno con entradas independientes,en la planta A vivia la abuela con mis papas,la B la habian alquilado para Irma con su esposo Leonardo.Irma Maidana era de nacionalidad paraguaya,bonita e Inteligente y buena persona.Llegar a tener su propia casa les significaba algo valioso,el nido tambien para seguir soñando.La pintaron a gusto, agregaron plantas, tapices tejidos a mano ,un equipo de musica. Asi todo.En su rutina a las 12 del mediodia bajaba para ocuparse del hogar y la abuela mas que nada.
Alegria y tranquilidad con la atencion de Irma. quien solia escuchar musica todo el tiempo con los auriculares puestos mientras realizaba las tareas.

-Sabes Francesca soy presidenta y representante de las fans del grupo musical Bronco!

-Bronco,disculpa no lo conozco?..
.
-Provienen de Mexico,despues te bajo musica ,hay novelas argentinas que tiene de fondo algun tema de ellos.!....Ahora estoy con el tema de las remeras con la presentacion de recitales en Argentina para Agosto.!
Les organizaba los recitales desde la llegada al Aeropuerto de Ezeiza hasta la confeccion de carteles y afiches siendo su amistad con el grupo musical un nexo en el tiempo.Valioso aporte aun hoy reconocido en todos los escenarios por dicho conjunto musical Bronco de rancheras y baladas
Fue asi que la abuela le enseño a cocinar empanadas,terminaba preparando una gran cantidad para los fines de semana tan bien condimentadas !
Cuando llegaban Blanca y Nina -las hermanas de Isabella solian disfrutar en grupo en motivadoras tertulias.
Irma empezo a llamarlas "tias" y decian encantadas,....-tenemos una nueva sobrina!

Impensado(a pocos dias)
-Que te sucede ,te veo palida Irma......Te sentis mal?

-No se bien,me siento extenuada Francesca,tal vez sea gripe.(Isabella la obligaba desde entonces a dormir la siesta ,por otro lado ya tenia un turno con el medico .El sabado siguiente se dirigio al sanatorio , quedo internada,leucemia fue el diagnostico final.
La noticia sacudio desde lo mas profundo del corazon.Inclusive hacia pocos dias -antes de los sintomas- habia festejado su cumpleaños, habia renovado el color rojizo de sus cabellos,los mismos que despues fueron afectados por la radiacion.

Preguntas si respuestas.Llego julio,invierno,un dia 8 de julio fallecio.
Llegaron sus hermanas de Paraguay -mucho antes-para llevarsela a descansar definitvamente al pueblo natal,en su morada final esta la misma imagen de Guadalupe con la bandera del grupo musical Bronco.Pero lo mas impactante fue la "sonrisa" con la que se despidio en el instante de su partida a los cielos. Si! Irma tenia una leve ,clara y dulce sonrisa en sus labios por lo que todos quedaron tan sorprendidos! 
Sonrisa de angel dormido .

viernes, 1 de mayo de 2015

COGITACIÓN QU


Simíliter Cadens
preeminencia, baraje de la conciencia
veces la desdicha, única inconsciencia
¡ despierta!, y desemboca la humildad
la sublimidad, la energía de la bondad

invocación de la existencia complaciente 
la controversia se hace presente y alarmante 
las discrepancias uncidas en desconcierto
buscando la equidad en la respuestas vivas

promontorios de equívocos entrelazados
confusos espejos en añicos, circundantes
reflexionas y refracciones tanto semejantes
avocado a la desinencia de la mete parlante

lo real de lo subliminar se entrecruzan solas
las vertientes se asemejan a profusas olas 
la calma , inquieta, ve avecinar falas vitolas
la pericia en las decisiones, lentas caracolas

vendavales y manantial afluentes en desigual
la discordia pide piedra donde poderse sentar
arrinconadas las ideas, se exprimen el pensar
la lucidez lucida, algo distraída se a de imperar,
¡ parece igual!, priva lo que podamos equivocar

conclusa marea, abierta la esclusa, ¡respira...!
toma el aliento, del arrepentimiento, ¡ y mira!
recapacitar, lo errado determinado,¡ y suspira...!
la conducta abrupta , retraerla, reprímela, ¡ la ira!

sopla el aliento, es buen momento que se acerca
expulsa en sorbetes, lo que pudiera ser tu cerca
líbrate de las indecisiones y abre tus compuertas
pues de sabiduría sabe mas el caracol en su huerta
similicadencia en espiral, aun viendo la verja abierta.

NOTA QU: homeóptoton o simíliter cadens, 
similicadencia propiamente dicha (igual flexión).

María Marta Stanganello



Tomar consciencia de las margaritas
justo en el corazón 
ahí
en ese lugar 
donde otras flores no caben...
ellas.. no otras deben estar 
ya un par de rosas 
se fueron sobresaltadas
y a un jazmín
lo dejaron inquieto 
llorando un tango ...
Tomar consciencia de las margaritas
justo en el latido exacto
en ese lugar
cercano a la sin razón
alejado de lo terrenal y mundano
será siempre señal de sangre despabilada ...
Tomar soplos de simpleza
como desafío automático...
porque trasgredir en el óxido del tiempo
es tarea sintética para espíritus con pájaros (...)

Javier Sarasola Ruiz




POESÍAS BREVES


VIII
Confieso que he amado la lluvia,
que me he perdido en tus ojos,
que he sido, alguna vez, 
un breve rumor de lágrimas ajenas
y de brumas.
Confieso que he amado al viento
y al alba y a los vuelos.
Confieso que te he amado
como un verso del pasado
cantando al futuro.

IX
Diría que te quiero en la noche,
diría que te quiero en el amanecer,
pero diría, esta tarde,
que te quiero mientras la vida nos permita
amar las noches y los amaneceres
y estas estrellas brillantes.

X
Breves nacen, poesías,
de mis manos, cuando
acarician el río tibio
o tu piel o tu boca.
Breves como una 
despedida.

ESPERPENTO


Y ahí, todo abandonado,
Deshuesado,
Reducido a una vorágine amorfa
Tras haber lamido cada gota
De la locura agria, dulce, ardiente,
Que fluye por lo más oculto
De la experiencia aberrante;
Alzo mis ojos nunca contritos
¡Pero si doloridos!, para entrever
En la palabra derrumbada 
La lumbre tenue de la Muerte
Que da vida a todo fin…
¡Oh poeta, vampiro o perversión!
El hombre desciende de las ramas 
O de las sombras que cuelgan desahuciadas
En el propósito de fugarse del ensueño.
Y el alma: ¡La Poesía!,
Atrás en el abismo
O en el cenicero de la honda inmensidad,
Consumiéndose poco a poco
Como las cascadas ya extintas 
Que en su caída perenne al no-ser, contienen
Todo el fuego incandescente de la mar.
Ya los pasos furtivos no recorren caminos,
Sino que la noche insomne 
Es el estrépito de un día más.
Ya los brazos no conocen la batalla,
Pues ante el peso de las cadenas 
Se han sembrado en tierra muerta
Para dar como fruto
El sol negro de la sumisión.
¡Oh poeta, vampiro o perversión!
El hombre de hoy, ¡el tecnológico!,
Es el vil desprecio de su propia idealización.
Tan ciego y tan yerto está en vida
Que no siente cómo bulle la revolución
En la hendidura de su verbo contristado.
Cómo duele haber perdido los huesos
Para descubrir que
El hombre desciende de las ramas 
O de las sombras que cuelgan desahuciadas
En el propósito de fugarse del ensueño.

FUGA DEL PARAÍSO


-IV-

Soy lobo estepario,
La soledad del horizonte es mi mundo,
Me apareo solo cuando hay luna celestina en el cielo,
Oleaje soy si estoy anclado a tu cintura Mujer.
Escribo poesía no solo con mis labios en tu cuerpo,
Poeta soy si estoy haciendo el amor en un poema.
Argonauta soy cuando me encuentro 
indefenso ante el vellocino de tu sonrisa.
Me das motivos para delirar si me besas.
Disfrazado de suspiro después de medianoche
tejo telarañas con mi boca en los rincones
húmedos de tibieza de tu piel.
Si he de amarte en un acto de locura
Déjame ser nostalgia en tu memoria,
Suspiro que escape de tus labios
Para cuando la noche encienda luna llena,
y donde yo estuve en Ti haciendo poesía
encienda llama y voz silenciosa en tu carne.